El días 19, TESLA convoco un “AI Day”, día de la inteligencia artificial IA, con la idea de motivar la búsqueda de talento y con la intención de desvelar algunos de los sistemas, productos y futuros en los que se están moviendo.
Mi impresión sobre el acto, TESLA está revolucionando, no solo, el mundo de la industria manufacturera de la automoción, está sentando las bases sobre la que se va a fundamentar la industria del silicio, hardware, supercomputación orientada a redes neuronales, desarrollo de metaversos, servicios de movilidad, aplicación de técnicas de video y 3D nunca antes vistas, herramientas procedurales a utilizar en el mundo de la creación de juegos, entornos de simulación virtuales, distribución y almacenaje de la energía, termodinámica creativa aplicada a la disipación de calor, la nube y su uso intensivo en la recopilación de datos, sistemas de proceso altamente customizables y escalables que pueden adaptar esfuerzos a tareas determinadas en tiempo real, robótica, efectos y nuevos paradigmas en la economía mundial, sistemas de innovación agiles basados en métodos iterativos, y eso, solo, si nos quedamos en la primera capa de análisis.
Vemos como ideas que solo hemos visto o leído en obras distópicas, empiezan a emerger con solo los irrenunciables propósitos de una mente de ingeniero, emprendedor y visionario, Elon Musk.
En un mundo dónde el “vaporware” es utilizado como herramienta de marketing y se desvanece en promesas incumplidas o ni tan siquiera planteadas como un fin alcanzable, llega un señor y en 10 años humilla a toda la industria espacial (con décadas de solera), donde remueve el tablero del “Cómo exprimir un motor de explosión hasta el infinito y más allá” y de un plumazo genera la confianza bursátil para capitalizar, con números, que ni sumando todas las grandes compañías de automoción más longevas y acreditadas alcanzan a igualar, y eso sin mentar sus otras aventuras solares, cyberneuronales, y otras que quedan fuera de las portadas, ….de momento.
El “establishment “se pone nervioso cuando alguien empieza a jugar “fuera de la caja” y alcanza tanto poder, la burocracia más apoltronada ve amenazado su “modus vivendi” desde que el mundo es mundo, y eso es el mayor de los riesgos, porque la innovación introducida en el mercado por el empuje de un solo hombre que sabe cómo orientar el talento de muchas personas y equipos de trabajo, y que se mueve “on the edge” en todos los parámetros de su vida, es de un orden de magnitud nunca antes visto.
Además de todo lo inherente a la persona en cuanto a inteligencia y talentos, también hay que reconocer que en la suma también participa esa mente de riesgo empresarial y astucia para los negocios, y, un magnetismo que sin desbordar empatía (seguro que en el camino de esfuerzo ha dejado muchos cadáveres de talentos que no han seguido el ritmo) consigue aglutinar voluntades y encaminarlas a propósitos únicos.
Por lo que mí me atañe, y en lo que llevo mucho tiempo, el mundo de la SmartHome y el IoT, estoy convencido de que, el “santo grial”, “la piedra cuadrangular”…. la “killer app” de lo nuestro, acabara por converger con este señor, no en vano ese minimalismo a la hora de plantar una pequeña casa prefabricada, para vivir, cerca de su trabajo…y que por ende va a desatar muchas ideas de cómo debería ser la vida para esos futuros humanos fuera de nuestro planeta, no sé por qué va a ser más decisiva que el “palabro” de moda ….“MATTER”.
Estaremos atentos a cómo evoluciona todo, porque 1 Exaflop de red neuronal (con promesa de un “follow up” de un X10), cientos de personas haciendo “labeling”, simulador con capacidad procedural, o no, de hacer miles de pruebas alocadas e improbables y nutriendo a un deep learning alimentado de, en breve, millones de vehículos, un hardware por encima de todo lo conocido,….y el ojo puesto en un humanoide para hacer tareas peligrosas, aburridas o repetitivas….ufff, apasionante!!!, por favor pónganle una tercera dosis, ya, a ese señor,¡¡por tutatis!!!….que no se nos vaya nunca.
La vuelta al cole ya está aquí, vamos a seguir, en Domodesk, con lo que íbamos, a seguir con las múltiples iteraciones 😉